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jueves, 31 de mayo de 2012

24.- Mini Kung-Fú contra los ladrones de joyas


En la España de 1973 todavía no se conocía demasiado al gran Bruce Lee, y si le preguntabas a la mayoría por el Kung Fú te contestaba que qué te pasaba en la boca. La llegada de la serie norteamericana "KUNG FU" con David Carradine de protagonista, fue todo un fenómeno social y dio a conocer las artes marciales en nuestro país. En realidad, las artes marciales que se mostraban en la serie se llamaban así porque el director de especialistas se llamaba Marcial... porque Kung-Fú, lo que se dice Kung-Fú, no había mucho. Las peleas eran tela de ortopédicas y te tenías que tragar una hora de charlas y filosofía oriental de mercadillo para disfrutar de dos patadas mal dadas a los cowboys macarras de turno. Pero aun así la serie molaba mucho, era algo novedoso y todo el mundo se enganchó. Así, para la España casposa y patilluda de los setenta, el Kung Fú seguía sin ser un estilo de lucha, el Kung-Fú era Kwai-Chang-Caine, un monje Shao Lin que escapa de la justicia y emigra al salvaje oeste norteamericano, donde su misticismo y paz de espíritu contrasta con la pintoresca panda de animales que colonizaban la zona.

Presentación de la teleserie "Kung-Fu". El que hace de Caine niño se llamaba Radames Pera, pobre. 
El que hace de Caine jovenzuelo es Keith Carradine, el hermano de David. 
Como curiosidad, decir que la idea original de esta serie era de Bruce Lee, pero no le dejaron protagonizarla.


¡Qué tiempos, oye! Yo, claro está, con 15 añitos recién cumplidos, me entusiasmé con el éxito de la serie y me lancé a plagiar descaradamente la idea. Así surgió Chu-Fín, o sea "Mini Kung-Fú", un experto luchador de apenas 8 años de edad, igual de muermazo que Carradine, pero que suelta charlas filosóficas rayanas en el absurdo surrealista y que en lugar de patear los desiertos de Arizona, se pasea por los tejados de la gran ciudad metiéndose en toda clase de líos y pateando culos de gánsters de medio pelo. ¡Magistral!

De aquel "remake" carabanchelero de la exitosa y premiada serie producida por Ed Spielman, surgieron verdaderas joyas cinematográficas de las que ya hablaremos. Pero Mini Kung Fú no fue solo un personaje de la gran pantalla, no señor, también fue un personaje de cómic y ¡Alucina Vitorina!... ¡De Fotonovela! 

La fotonovela, genero editorial que narra historias mediante secuencias de fotografías y textos tipo cómic, fue muy popular en los años 60 y 70. En estas publicaciones casi siempre se contaban historias de amor y romance, estilo Corín Tellado, aunque también las había más bizarras y subiditas de tono.

Ejemplos de fotonovelas de la época: a) Un ejemplar de Corín Tellado ("Me has confundido") en cuya portada vemos al galán patilludo, que acaba de salir del curre en un taller de Algete y arrima cebolleta a una gachí que se hace la confundida. b) Namur "Peligro Supremo", genial cubierta en la que se observa a Fefita Carcañales, ex-secretaria de dirección, arreándole una yoya tremebunda a su jefe, que le acaba de comunicar el despido. c) Inenarrable el traje de "Araña Negra" y... bueno, inenarrable todo. d) ¿Qué decir de "Sabrosas" Pornoaventuras de ayer y hoy? Su título ya es un poema: "Deleite de Cochas Pechochas"

El gran Gabriel Pontelo, Supersex: un extraterrestre que en lugar de antenas calzaba un cipote del calibre 133. 
Sus poderes eran, a saber: 1) Partir brazos con golpes de kárate y "seducir" a todas las macizas que se cruzaban 
en su camino mediante la segregación del "fluido erótico".  Famosa entre la comunidad pornógrafa era la 
exclamación que profería Supersex cada vez que alcanzaba el clímax: ¡¡Ifix, Tcén, Tcén!!

La edición original de la única Fotonovela de Mini Kung-Fú data de 1975, y sus actores protagonistas son los mismos que los de la serie cinematográfica. La cuidada fotografía es obra de Rosa Mª Martínez y Javier Martínez.
Es curioso observar como se cita en los créditos a un tal "Rafi 75" como autor de la portada, cuando en realidad la cubierta es la tapa de un bloc de dibujo... ¡Menudo morro! También es curioso como a Chu Fin le aparece y le desaparece el gorro de una viñeta a otra. Pero lo más curioso y digno de mención es el retoque "digital" con rotulador "Carioca" negro de la barba del jefe de la banda.


En primicia para "El Pirata, Fanzine Suburbial Alegórico", y rescatada del baúl de los recuerdos, dónde dormitaba llena de polvo, aquí llega esta épica aventura. La hemos remozado un poco para hacerla más legible, pero el espíritu es el mismo. 





Impresionante.

La moda por las técnicas asiáticas de lucha continuó durante mucho tiempo. La serie "Kung Fú" dejó de emitirse, pero llegaron las legendarias cintas de Bruce Lee, que tuvieron su zenit en "Operación Dragón" y en "The way of the Dragon" donde Lee se parte la cara con el mismísimo Chuck Norris en el Coliseo romano. En esa época, Marvel Cómics, que no era ajena al tirón comercial de las artes de Marcial, editó "Sang Chi, Master of Kung-Fú", y claro está, en la editorial "Migui Cómics" tardaron "ná y menos" en fusilar la idea. Así fue como nacieron los míticos "Los 2 Super Judo". Pero esa, amigos y amigas, es otra historia. 


Luego ya después, claro está, llegaron Jackie Chan, Las Tortugas Ninja, Kárate Kid, Sor CitroenBola de Dragón, Jet Lee, Kung Fú Panda y to la purrela. 

Y acabamos este "post" tan "vintage" y tan monográfico sobre el Kung Fú con una joya como una olla: La portada de la inédita aventura de los 2 Super Judo "Visita al Podólogo" ¡Canela fina, tu!

Rafael Martínez Sainero, Pirata 2012

domingo, 27 de mayo de 2012

23.- Cómo acabar para siempre con "Los mercados financieros y la prima de riesgo"



    Dirigí mis pasos hacia "Nuestra Señora de la Perpetua Usura", templo de altísimo interés, no arquitectónico ni cultural precisamente, y procedí a metérsela a un cajero, que por ser automático, ni sintió ni padeció. Le confesé mi secreto digitalmente, y el cajero, tras unos momentos de dubitativo procesado con mi tarjeta en sus entrañas, me la chupó. Mandóme el cajero luego a tomar consultas a la agencia de mi entidad y hacia allí me dirigí, apesadumbrado, humillado hasta los tuétanos, secuestrada mi plástica hacienda por un jodido robot. En la agencia de la entidad le dije a un cajero (casi tan automático como el anterior) que me la habían chupado; “asín”, sin más, en la puta calle, de modo sospechoso e impune. El funcionario me miró de arriba abajo con cara de incredulidad manifiesta, sin duda alguna preguntándose cómo podía existir en este universo algún ente al que le pudiera apetecer chupármela. El cenutrio careto del cajero de carne y hueso de la agencia de mi entidad era un acta notarial, signada y rubricada, que certificaba que lo único que hacía funcionar al funcionario eran sus funciones vitales, y no todas, si nos atenemos a la velocidad de procesado mental de la que hacía gala.
    Y va y dice:
 - Pues si el cajero le ha retenido la tarjeta por algo será.
    Por algo, sin duda... Por jilipollas.


Rafael Martínez Sainero, Pirata 2012
Del Ensayo: “Recursos Financieros, Cash Flow y dividendos chuchurríos



jueves, 24 de mayo de 2012

22.- PIRATEX, Pánico en la Ozonosfera



¡Ey, gente!: Sin más preámbulos, presentamos dos descacharrantes viñetas inéditas del gran Pope, que son en sí mismas:

a) Un tratado de ingeniería aeronáutica (con infografía incluida del funcionamiento del absurdo “C.A.S.A. Target 37 Señuelo”)

b) Un magnífico supuesto de ciencia ficción bélica (en la era de la decadencia de la aviación)

y c) Dos aventuras completas del recluta (cualificado) Piratex en el vigesimoséptimo escuadrón de señuelos. ¡Puta Mili!

No se puede pedir más por menos. Pope es un genio no reconocido de nuestro tiempo. En sus manos, un portaminas Faber Castell de 0,5 es un arma cargada de imaginación, humor, talento y arte. Dos perlas para disfrutarlas como enanos*.

*Algún día preguntaremos a algún enano si ellos tienen algún secreto para disfrutar más intensamente que los demás.









¡¡La Mili me tiene hasta los cojones!!
19 horas vigilando en la ozonosfera y te dan un bocata de mortadela… ¡Coños! Ahí viene el sargento para meterme el broncazo por lo del motor ¡Ful!

En el ocaso de la aviación, el recluta (cualificado) Piratex desembarca de su avión señuelo, una absurda experiencia alimentada por hidrógeno líquido.

El “27th de Señuelos” tiene la vital e importante misión de atraer la caza enemiga en la ozonosfera. Así, la caza de cobertura puede ir tranquilamente a derribar los señuelos enemigos.

El “Target 37 Señuelo” corresponde a una concepción aeronáutica muy específica: Su perfil aerodinámico está diseñado para ofrecer la máxima reflexión al radar; y así puede ser captado rápidamente por el radar enemigo. A este respecto, observar el enorme depósito (A) de LH2 y el propagador de señales electromagnéticas amplificadas (B)
Por otro lado, en previsión de que en vuelos nocturnos no funcione el radar enemigo, lleva los postquemadores fuera del carenado (C), con lo cual, al atravesar las capas medias de la ozonosfera (donde el ozono halla su mayor concentración) produce un resplandor visible en toda la curva geodésica del meridiano.

domingo, 20 de mayo de 2012

21.- Los Muñecos de la Abuela


María Pasero y sus guapas biznietas: Eva y Sandra, posando junto a dos de sus de sus más 
terroríficas creaciones: "La terrible tarántula azul" y el "conde Drácula".

"Animaguri" en Carabanchel

Mi abuela materna, María Pasero, tiene casi 100 años de edad y la mente más lúcida que muchos académicos e intelectuales de postín. Y además es una artista como la copa de un pino. Su arte no es la música ni la pintura y mucho menos la danza, al menos a estas alturas de su vida; pero si le das un poco de lana, unas cuantas telas de colores, agujas, hilo y cuarto y mitad de abalorios de la "Viuda de Pontejos", es capaz de crear unos monigotes "naif" cantidad de cachondos y que deberían estar expuestos para disfrute del personal.
Este tipo de arte es muy apreciado en Japón (dónde si no) y es conocido como “Animaguri”. Los “japos” hacen cosas muy cucas, ved por ejemplo estos monigotillos de “La Guerra de las Galaxias” manufacturados en punto de cruz. ¡Adorables!

Están casi todos: Vader, Chewaka, Leia, Han Solo, Luke, 
un soldado de asalto, Yoda, un ewok, R2D2 y C3PO

Mi abuela dice que solo lo hace por entretenerse y para echarse unas risas con los hijos, nietos, biznietos y demás admiradores cuando la visitan, mientras les enseña y les regala los muñecos. Este continuo saqueo consentido ha hecho que la totalidad su obra esté muy dispersa (Hay muñecos de la abuela expuestos incluso en una biblioteca pública municipal) por lo que desde “El PirataFanzine hemos decidido recopilar cuantos más “animaguris” de la abuela sea posible, para ir mostrándolos por entregas coleccionables… ¡Molaría hacer un álbum de cromos!

Bueno, abuela, va por ti, junto con el aplauso y el homenaje de todos los que tenemos el privilegio de disfrutar tu arte. Estamos muy orgullosos de ti... ¡Jabata!

Aquí van las dos primeras imágenes:
1.- La pulpa Paula, Michael Jackson y un bolsito monedero
2.- Dos Michael Jacksonsy su prima de riesgo, la teita zumbona con bikini plateado



Y para demostrar que el arte es genético, un botón de muestra: Os presentamos el monigote “Indio Colchonero”, maravillosa obra en fieltro, lana y serrín, obra de mi hermana Roxy.

Con hermanas y abuelas así, es triste reconocer que yo no sé ni coser un botón… pero bueno, dar jabón se me da como hongos, ¿no? 

¡Hasta la próxima, Fanzinerosos y Fanzinerosas!

Rafael Martínez Sainero, Pirata 2012

Impresionante muñeco de Roxy Martínez: "Aguila loca rojiblanca", bravo de tribu atlética, gran bebedor de "Agua de Fuego", dueño de "Tubo de Trueno" para acabar con vikingos cuchillos largos Chamartín.

sábado, 19 de mayo de 2012

20.- El Estribillo 3ª

Hay canciones que solo tienen sílabas. Al escucharlas, el estribillo puede confundirse con los versos, pero ahí está el señor "Trololó" marcando la entonación con su fuerza barítona resaltando el argumento. Es un cantante ruso barítono de la época de los setenta. La canción trata sobre un militar cowboy montando en su caballo cuando ha regresado a su granja…  ¡el Rick Astley ruso!


viernes, 18 de mayo de 2012

19.- Juan M. García Varilla, "El Grodo Lisérgico"

De Izquierda a derecha: a) Portada de "Hazañas Bélicas" con: Pirata, tío Rambo y el Varilla en plan S.W.A.T.; b) Foto del comandante en jefe de 1ª Región "Passada", coronel Martínez de Buten y Buten; c) Prisionero de Dachau; d) E.T.A. Escuela Transmisiones Aviación; e) Ampliación detalle de "a)" y f) "Reflejo", Óleo sobre lienzo del Varilla, un estupendo autorretrato con marco cuco.

¡Dices tú de mili!

La Escuela de Transmisiones del Ejército del Aire, en Cuatro Vientos, Madrid, allá por los felices ochenta del siglo pasado, lo único que nos transmitía a don Juan Manuel García Varilla y a éste que les escribe, era desasosiego. Como buen vallekano de Entrevías, el Varilla era (e imagino que lo seguirá siendo) un buen tipo: rojeras, culto, solidario, antimilitarista, y todas esas cualidades que se les presupone a los “antisistema” concienciados socialmente, que de puro responsables e idealistas, resultan estar más integrados en el sistema que muchos políticos y hombres de negocios (sucios) que se pasan el sistema por el forro de sus cuentas en paraísos fiscales.

Con el Varilla compartí “pistas americanas” que resultaron ser más divertidas de lo que un principio imaginamos, horas de sueño en interminables guardias, aprendimos a quitarle el seguro a una granada de mano, intentamos aprendernos (y fracasamos miserablemente) el himno de la glorioso cuerpo de la aviación española, vivimos desde dentro del cuartel el intento de golpe de estado de Tejero… Y muchas más hazañas bélicas que, por no aburrir a la audiencia con batallitas seniles, omito desde ya. La única cicatriz de guerra que poseo se la debo a él: Destinado al aguerrido “IV Cuerpo de Operaciones Especiales de Peluquería y Estética”, se encargó de rebanarme con unas tijeras roñosas un cuarto de lóbulo de la oreja izquierda. Involuntario fuego amigo, profusa sangre derramada por la patria entre berridos de dolor e improperios por mi parte y el descojone del Varilla (entre muestras de arrepentimiento, eso sí) y de su compañero el “Putas”, el otro “peluca” y amigo. Fue aquel un daño colateral que no empañó un ápice nuestra genuina amistad y campechana camaradería.

Además de estas amenas actividades castrenses, compartía con el Varilla aficiones e inquietudes culturales. Excelente dibujante, pintor y escritor; pésimo peluquero, colaboró en los primeros números de “El Pirata” Fanzine Alegórico Suburbial, con diversos trabajos que ponen de manifiesto la grandeza y creatividad de este versátil artista urbano y, como dicen ahora, mejor persona.

Portada y Sumario de "El Pirata, Fanzine" de Mayo de 1981. La desasosegante Ilustración del sumario es obra del Varilla, y nos muestra en todo su esplendor a un fauno trompetero pichacorta con un petardo cargao de marroquí y con un colocón de grado 13.

En este primer número de "El Pirata", se publicó este artículo titulado:

Varilla: El Grodo, Rita Suárez y cia.

Unos escasos reductos de imaginación surrealista y creatividad biomecanoide subsisten aun en la periferia madrileña. Uno de estos reductos es el Valle del Kas y uno de los genios de esta cultura del asfalto es el Varilla, también conocido por sus seudónimos "El Grodo", o "Rita Suárez". 
Dibujante y pintor autodidacta, comenzó su trayectoria artística con un marcado estilo "underground" que evolucionó en un surrealismo de trazos abigarrados y poderosos. Ha colaborado en en diversos fanzines de edición limitada, viendo censurados algunos de sus trabajos por moralistas de mala baba. 
Como autor de cómics, su principal personaje es el Grodo Lisérgico, y su obra cumbre "Las hazañas del Grodo valeroso". 
Actualmente colabora en la superproducción de animación "Caries" y experimenta con nuevas fórmulas de color para sus ilustraciones con colorantes alimentarios Mc Cormick.


Espectacular ilustración de Juan M. García Varilla para un fondo del Proyecto “Caries”, 
película de animación de Ciencia Ficción, producida por Pirat Films, que nunca llegó a ver la luz 
por falta de presupuesto y, lo que es más grave, de guión. 





Como escritor también nos obsequió con espléndidos relatos. Valga como muestra este magnífico relato corto de Ciencia Ficción de la buena.

Ilustración: "Camareta Simbólico" por Rafael Martínez Sainero, Pirata 2012

Condicionamiento

    Nauj Karcka deslizóse suavemente encima de las marcas mnemobióticas del vestíbulo principal, en la estación de Pazz-y-Ficks. El monordenador de su manga izquierda le daba un margen de tres minutos hasta la llegada del próximo lenticular. Disolvió la plasmopia del traje con una sacudida de mano y, ajustándose la corbata, entró en el receptáculo. Aprovechando su soledad, Nauj Karcka absorvió una dosis de calma del expendedor mecánico.


- ¡Vaya, ya han vuelto a modificar el precio! – pensó.

    Un coste de medio pelanto se plasmopictó en su cerebro, permaneciendo estable hasta que introdujo el correspondiente medio pelanto en la ranura del expendedor. No bien hubo acabado del masticar el ungético, su receptáculo comenzó a pulsar: Una, dos, tres veces.


- ¡Ya está !– pensó sin ganas, y agregó en voz alta:

- Planta de cervecería, por favor.


    El receptáculo se abrió inmediatamente, mostrando la escena tantas veces observada: viajeros aburridos que consumían cualquier bebida termoinestable; señoras gordas y maleducadas que no cesaban en su continua repetición de anodinos tópicos; funcionarios del lenticular aparentemente interesados en la supervisión del mismo...
    Nauj Karcka sabía que, a pesar de su total carencia de sed, iba a pedir un refresco.

-Una cerveza, alemana, por favor.

    El camarero simbólico pulsó uno de sus accesorios y el chorro fluyó amablemente al vaso.
    Nauj se dirigió al camarero:

-¿Sería tan gentil de reducir en un par de puntos la intensidad subliminal, por favor?
-Encantado, señor.

    Nauj Karcka notó como descendía su imperiosa necesidad de beber. Era un hombre de las afueras, poco acostumbrado a estos omnipresentes ruidos mentales inducidos por la metrópolis. De una manera natural, su pensamiento se trasladó a su nativo Alk-Orgón, donde anhelaba regresar, huyendo del atosigamiento de tanta agitación urbana, que impedía cualquier forma de relajación no inducida por ungéticos.

Nauj, eres tú Nauj!

    Extraído violentamente de su abstracción, una gota de cerveza resbaló por la barbilla y el vaso chocó algo más fuerte de lo que establecían las pautas de urbanidad contra el cristal del mostrador.

Enka, tú!

    Mientras el merengano celuloso del mostrador absorbía la última marca dejada por la cerveza derramada en el mismo, los dos hombres revivían una antigua amistad en la efusiva ceremonia de un largo apretón de manos.

-Oye, Enka… ¿Por qué no hacemos una corrida de cerveza, como en los viejos tiempos?
Ah, pequeño pícaro… Sabes que en cincuenta pruebas de ese tipo jamás he llegado a perder un solo pelanto, pero… Allá tú!

    El camarero simbólico sirvió las dos primeras jarras, que desaparecieron rápidamente junto a las dos siguientes, y a las diez siguientes. Y en el camino comprendido entre Pazz-y-Ficks y Mend-Al-Alvar, como una plasmoplia al ser sacudida, dieciocho jarras fueron vaciadas de su contenido. Cuando el lenticular se desplegó en el vestíbulo de Mend-Al-Alvar, Nauj Karcka se despidió tambaleante de su “viejo amigo” con una buena muestra de síndrome alcohólico que le daba un carisma especial.

- ¡¡E… Esto, E… Enka… Ah, tú… Hip… Ahí te… Te dejo diez pelantos… Pillín… Ha… Hasta la vi… Hip… Vista!!

    El camarero simbólico alcanzó los diez pelantos depositados encima de la barra, atravesando despreocupadamente el holograma que simulaba la figura de Enka, ahora proyectada a un 0% de opacidad y que aun despedía con la mano a Nauj. Seguidamente, con un gesto despreciativo, situó el emisor de subliminales cinco puntos por debajo del nivel anterior y, mirando en la dirección por la que Nauj se deslizaba vacilante camino de la salida, no pudo evitar mascullar:

-¡Paletos… Bah!

    Los diez pelantos tintinearon en su bolsillo y las jarras, totalmente secas y asépticas, volvieron a su lugar en la estantería.




¿Ya os habéis repuesto del shock que representa leer hoy en día algo bien escrito? ¡Dabuty! Y ahora, para finalizar, dos páginas de cómics, que ya es hora de que pongamos algo del majestuoso Noveno Arte. Y que mejor modo de estrenarnos que con la épica, descomunal, "TV Chotrrades" y con ese hit de la "SF" de la movida madrileña que significó "La Conquista de Marte". Con todos ustedes, "señás" y señores: El Varilla.






martes, 15 de mayo de 2012

18.- ¡Dame un Silbidito!


Entre las muchas cosas que odio con toda mi alma (que son ya demasiadas según mi psiquiatra) una de las que más aborrezco es a los tipejos (siempre son tíos) que van por ahí silbando en público. En realidad no es que me importe que la gente silbe, lo que no soporto es que silben tan mal. La gente que va por ahí silbando en sitios públicos es siempre gente que no sabe silbar. No falla. Lo que me pone malo de verdad es que es imposible completamente identificar la melodía que pretenden, sin ningún éxito, interpretar. Siempre me quedo con las ganas de decirles: “¿Pero qué cojones silbas? ¿No te da vergüenza, so payaso, que te estemos oyendo? Dime el título e intento enseñarte a silbarla bien… No molestes, joder. O si no lo puedes evitar, hazlo más bajito… ¡Pero cooooño! Hay gente que intenta leer o simplemente no volverse loca con tus insufribles chiflos de mierda!”

Estoy seguro de que la mayoría de estos tolilis ni siquiera quiere versionar canciones, silban por silbar, por llamar la atención, o simplemente por joder, o por demostrar que están contentos… o ¡Yo qué sé! ¡Arrrgggg! Me ponen malo, me dan ganas de coger unas tenazas y arrancarles con ellas las cuerdas vocales. Por supuesto, todo esto desde el buen rollito y sin acritud. Todos los que me conocen saben que sería incapaz de hacer semejante salvajada sin anestesiar previamente al silbador de turno con un buen batazo en la cabeza.

Todo este rollo previo no es sino una excusa baladí para decir que me encantan los silbidos. Sobre todo los bien dados, y los que no están dirigidos a mí.

El magnífico post de nuestra querida colaboradora Marisol, “El estribillo 2”, ha despertado mi curiosidad. Y también, por qué no decirlo mi absoluto desprecio por Chi–Flo–Fiú, el odioso y odiable chinorri imitador de pájaros del último vídeo mostrado. Y con su permiso y beneplácito (el de Marisol, no el de Chi-Flo-Fiú) voy a completar su magnífica labor de documentación recordando ciertas obras maestras de silbidito que son ya parte inherente de nuestra cultura y acervo.

En 1967, se hizo muy popular una tonadilla interpretada por un repeinado llamado Whistling” Jack Smith. Seguro que los más tarras la recuerdan. Fue una especie de tabarra, tipo canción del verano, digna de marcha de boy scouts. Tenía un título realmente inquietante “I was Kaiser Bill´s Batman


Aguantarla hasta el final tiene mérito. 
Yo lo he podido conseguir gracias a mi Guru Sawarma Pancha.


Otro silbidito que se grabó a fuego en nuestro lóbulo frontal, fue el de la machacona sintonía de inicio de la serie "Verano Azul"... ¡Dios nos ampare! Solo le faltaba un ¡Dabadaba dabadabadá! para fliparlo del todo.



¡Chanquete ha Muerto! No me extraña nada, eran demasiados episodios.


Pero el Rock también nos han dado joyitas del género muy, pero que muy buenas. Para muestra, dos botones:






Buenas, ¿eh? ¿Y qué me decís de este tema de Bobby Mc Ferrin, que es lo más conocido y famoso (que no lo mejor) que ha silbado en su vida?






Pero donde de verdad el silbido de calidad encuentra su hueco, es en el Séptimo Arte, en películas inolvidables en las que este elemento musical se convierte en protagonista absoluto de sus bandas sonoras originales. Disney utilizó los silbidos para las bandas de "Blancanieves y los Sietes Enanitos" y "Pinocho". Más tarde, "La Marcha del Coronel Bogey" de la maravillosa cinta "El Puente sobre el río Kwai" abrió la veda, y ya le siguieron Morricone y su magnífica "La Muerte tenía un Precio", "Kill Bill", y muchas más. 

Pero a mi, me vais a perdonar si no compartís mi apreciación, la canción con silbidos que mejor me cae de todas es sin duda alguna "Always Look on the Bright Side of Life" ("Mira siempre el lado brillante de la vida") de la obra maestra de los Monty Phyton "La vida de Brian", que es un temazo que te pone de buen humor solo con escucharlo, y cuyo estribillo debería ser una ley de obligado cumplimiento.






Bueno y ya me marcho con la música (con los silbidos) a otra parte. Muchas "Zenkius" de nuevo a Marisol por recordarnos este maravilloso y entrañable género musical... ¡Ciao, gente! Que ustedes lo silben bien, pero por favor, que se os entienda.


Rafael Martínez Sainero, Pirata 2012

17.- El estribillo 2º parte

Hablábamos de los "dabadabas" en las canciones de las bandas sonoras, esos versos repetidos en ciertas melodías. He pensado que no pueden faltar a esta cita otro tipo de estribillos también muy especiales. Hay un dicho que dice, que: “Las ilusiones se las llevó el viento” pues ¡vamos a divulgarlas a los cuatro vientos! para que quede constancia del protagonismo de esta parte rítmica tan entrañable y maravillosa que son los: “Los silbidos”

Voy a empezar con esta exquisita canción, compuesta por el prestigioso compositor, el señor: Burt Bacharach "Magic Moments"


Le toca al señor: Otis Redding - "Sitting on the dock of the bay", con un poderoso blues


  


Ahora los silbidos pasan a ser los protagonistas. Hacki Tamás, un virtuoso del whistling, interpreta a Mozart en  "Török induló-whistle 60´as"



Para terminar, un vídeo en el que los protagonistas desprenden magia y talento en este arte de silbar. 


Espero que os agraden las canciones. Quiero darte las gracias Rafael por la invitación al  blog de publicaciones: “Fanzinianas”

lunes, 14 de mayo de 2012

16.- Que corra el aire



De la exitosa serie "Como acabar para siempre con..." 
Hoy presentamos: "Los prejuicios Homófobos"

Que corra el Aire

    Bajé al bar a comprar tabaco y a tomar un cafelito. En la televisión del local podía verse a un chico guaperas que era entrevistado por una periodista con motivo de la celebración del Día Mundial del Orgullo Gay. Se quejaba el guapito (que dicho sea de paso, era  "miembro" del Colectivo de Gays y Lesbianas) de que el Presidente del Gobierno había recibido efusivamente a los componentes de la selección nacional de fútbol, y que a él y a su colectivo se negaba en redondo a darles audiencia para que le expresaran sus reivindicaciones.
    Miguel, el campechano camarero, soltó un comentario a bocajarro, sin destinatario concreto, mirando hacia el aparato (de televisión)
- Gay, Gay... ¿Qué coño es Gay? Toda la vida los hemos llamado maricones... ¿Por qué coño no llaman a las cosas por su nombre?
- Hombre - intervine sin haber sido invitado, movido por mi vocación docente - "Gay" es un término políticamente correcto que aceptan ambas partes. Convendrás conmigo en que quedaría un poco basto decir: "Soy Fulano de Tal, Presidente Nacional del Colectivo de Mariconas y Bolleras".
- "Pos" no, no "convendro" contigo, porque así es como se les llama... Bujarras, mariconas.
- ¡Que corra el aire! – saltó y soltó de pronto un tipo con pinta de heavy trasnochado que iba por su segunda copa de “pónchelo*” - esta gente tiene derecho a casarse y adoptar hijos. A mí, mientras corra el aire, me parece muy bien  que sean maricones... ¡Mejor! - apuntilló en plan macho de la manada - así tocamos a más tías.
- Si siempre se les ha llamado maricas – insistía, obcecado, Miguel el camarero - ¡Pues maricas!
- ¡Mientras corra el aire! - el heavy talludito estaba obsesionado con la circulación de las corrientes eólicas - O sea... ¿Sabes cómo te digo? Mientras corra el aire y no se me acerquen... ¡De puta madre! Tienen sus derechos ¿No?... Este tío - señaló al televisor - por lo menos habla bien y parece un tío... A los que no trago es los "afeminaos" con pluma, a los travestís de mierda... ¡Uy, esos! ¡Me ponen malo, esos sí que me tocan los cojones!
- ¡Ahí, ahí! - asintió Miguel y daba golpecitos con su dedo índice sobre la barra - ¿Y cómo se les ha llamado de toda la vida a esos?... ¡¡Maricones!!
- ¡Ya te digo! - el heavy apuró de un trago el ponchelo y tras un sonoro eructo pidió otro - ¿No echaban hoy  "fúrbol", tío?

    Pagué rápidamente y salí del establecimiento, más conocido como “bareto”. En la calle, por fin corría el aire. Allí se quedaban el hostelero con ínfulas de filólogo purista y el heavy trasnochado con complejo de ventilador, al que las "mariconas", sobre todo las de pluma, le tocaban los cojones (en sentido figurado, supongo)
- ¡Qué triste! - pensé - el día que me dé por salir del armario, con lo gordo que estoy, a más perchas tocarán los gabanes.

*Ponche con Hielo (Nota del Autor)

Rafael Martínez Sainero, Pirata 2012