53.- El Alfa y el Omega del Micro Relato

Mi admirado compañero don Jesús Manuel Cuerda, fiel acólito de la diosa hitíta Afasemetra y polifacético artista que tan pronto ejerce de guitarrista solista en grupos musicales ye-yés como toma la pluma para crear obras maestras de la literatura contemporánea, unió su talento al mío propio para presentar a concurso unos estupendos microrrelatos que no merecen, de ninguna de las maneras, languidecer en la papelera del despacho de los jueces de un jurado a todas luces vendido. Por ello hago justicia a tan bellos textos publicándolos hoy aquí, y conmino a la población mundial a manifestarse violenta y públicamente en repulsa y condena sin paliativos del fallo (¡y tan fallo!) del Certamen Literario de Micro Relatos que la Biblioteca Pública de Guadalajara (Castilla) organizó con motivo del día del Libro. ¡Menos mal que el premio eran cuatro libros baratos! que si no, la hubiéramos tenido. Y además fue en 2011, con lo que no sé a santo de qué vengo yo a estas alturas a liárla tan sumamente parda. ¡Pero es que es indignante ver tanta calidad literaria sin reconocimiento! Mirad si no: Este es el micro cuento que obtuvo el galardón, es obra de José Luis Rodríguez Munilla:

Un milagro

     Y lloró largamente, dándole gracias a Dios por la muerte de esa bestia. Su cuerpo llevaba ya cuatro días en el sepulcro y aun resonaba en sus oídos su voz aguardentosa, el silbido del junco, el llanto de los niños. Cuántas noches de angustia, esperando en la oscuridad del lecho a que él llegara con su olor a cabras y a vino rancio, temblando de miedo, llorando de rabia después bajo su cuerpo pesado.

     Dios es piadoso con aquellos que sufren, pensó, y enjugóse las lágrimas mientras escuchaba a su cuñada hablar con alguien en la entrada de la casa. Una voz profunda y dulce preguntaba por él. “¿Dónde habéis puesto a Lázaro?” Sintió un escalofrío. Y siguió la voz, tan dulce que parecía sobrenatural:

“Llevadme hasta la entrada de la cueva y quitad la piedra.”

Bueno, la verdad es que el relato es bueno. Mi enhorabuena al autor. Malos tratos, un tema de rabiosa actualidad aunque sea tan antiguo como el mundo. Lo que no me parece bien es que ponga en tela de juicio el juicio (¿Quien dijo que las redundancias no molan?) de Nuestro Señor Jesucristo a la hora de elegir a los individuos dignos de merecer la acción de sus superpoderes. 

Al margen de vanas cuestiones teológicas, mirad que guapos los 4 "micros" que presenté a concurso, y a los que "Un Milagro" derrotó:

Animales de compañía

     Ella dijo que había perdido la fe en el ser humano, más concretamente en el de género masculino, por lo que decidió comprarse un gran danés para comprobar si aquello de que el perro es el mejor amigo del hombre, también era aplicable a la mujer.

Con la venia de Su Señoría

Su Ilustrísima Don Anselmo R. D., Titular del Juzgado de lo Penal, dictó sentencia firme contra Eustaquio A. M., condenándole a 13 años y 1 día de reclusión mayor por tenencia y distribución ilícita de material pornográfico infantil. Luego, con la conciencia tranquila, la maleta llena de preservativos y la cartera repleta de dinero del Estado, partió hacia el aeropuerto dispuesto a disfrutar de sus vacaciones en Manila y Bangok.

La Previsión de los astros

Capricornio (21 de diciembre – 19 de enero)

Aprovecha el fin de semana para dejarte llevar por ese salvaje que llevas dentro. ¡Ya está bien de contenerse!

Incapaz de entender que la entusiasta astróloga había utilizado el enérgico epíteto refiriéndose a cuestiones lúdicas, Sinforoso, el paranoide exdubitativo, agarró el hacha entre asentimientos y corrió a buscar a su desventurada familia.

En un lánguido día gris

Estaba asomado a la ventana. El viento soplaba frío y diminutas gotas de lluvia golpeaban mi cara. El humo del cigarro revoloteaba entre mi pelo y la tormenta no acababa de llegar. Pensé en ti, como he hecho durante todo este nostálgico y extraño fin de semana, añorando la lluvia, echándote de menos.

Eres la lluvia que limpia mi alma, mi recuerdo amable, mi antidepresivo favorito. Pero siniestras Cábalas y tristes augures me dicen que no debo mojarme.

Y la tormenta nunca llega.

Nunca llega.

Bueno, esos fueron los primeros cuatro micro relatos que escribí en mi vida, y no es por que yo lo diga, ya que mi natural humilde me impide tirarme el rollo en demasía, pero alguno de ellos es bueno y hubiera merecido mejor suerte.

Por su parte, Jesús presentó tres "micros":

El Escondite Perfecto

Hoy hace tres años desde que desperté de mi coma después del gran trabajo del equipo médico del hospital. He perdido la visión, el habla y la capacidad auditiva. El doctor Medina desistió el año pasado y ya no me someten a estímulos para recuperar el tacto; por lo menos no siento ningún dolor.

Afortunadamente me dio tiempo a esconder el cadáver. No soportaría estar en la cárcel.

La Pandilla

Carlos, ¡mira!, gritaba Agustín mientras lanzaba la peonza. ¿Por qué no vienes con nosotros? contestó Ángel. Prefiero jugar yo solo, estoy harto de que me dejes siempre sin canicas, respondió Agustín frunciendo el ceño. Sabes que no juego bien. Estoy harto de que abuses de eso y acabes quedándote con todas mis canicas.

Agustín se recolocó la corbata y volvió a entrar en el despacho.

Madre mía, dijo Carlos a girándose hacia Ángel. Era mucho más divertido antes de que le hicieran gerente.

Y para terminar, el relato que debió ganar. Una obra maestra de lo escueto, del minimalismo, que condensa en 5 palabras toda la esencia de cualquier narración: Planteamiento, nudo y desenlace. Y después la nada... el vacío post Apocalíptico... la contracción suprema del Universo... la Leche en Vinagre... y porqué no decirlo: El Alfa y el Omega de los Micro Relatos.

Alfa y Omega

Erase una vez un fin.

© Jesús M. Cuerda. 2011