300.- Adolfo Suárez, el último patriota.

Portada de TIME: La Democracia gana / Baño de masas grasas / "Suárez" Retoque digital por Juan Varilla.

Hubo un tiempo en que este extraño país de países estuvo dividido en dos fuertes tendencias ideológicas. Incluso hubo tiros de por medio. Ese tiempo (sin los tiros, a Crom gracias sean dadas) aún perdura. La izquierda y la derecha se echan mierda mutuamente y compiten día a día por ver quien tuvo y tiene mayor número de ladrones en sus filas. A estas alturas de la película creo que queda suficientemente demostrado que absolutamente todos, sea cual sea su orientación política o sexual, son unos corruptos y unos chorizos de manual. Sin embargo, muchos españolitos siguen haciéndoles el juego, discutiendo entre ellos sobre quien tuvo y tiene mayor número de ladrones en sus filas, votándoles cada cierto tiempo y aumentando cada año el número ingente de políticos que viven de la sopa boba del Estado (incluidos los propios enemigos del mismo, como algunos independencieros fascistas de Polonia del Llobregat y algunos terroristas recientes de las provincias vascongadas).

Una panda de parias de la tierra, vestidos con sus mejores galas, en la corrida de Fallas / Gente de Centro /
Al loro con el tipo que pasa de hacer el saludo natzi. "Tenía un manchurrón de sudor en el sobaco" declaró.

Lo que no comprenden ni los rojos (según los fachas) ni los fachas (según los rojos) es que al resto de los españoles (y "semos" muchos) nos asquee esta prolongada lucha por el poder sustentada por miles y miles de hooligans de partido. No entienden que no tomemos "partido", nunca mejor dicho. Este mismo sentimiento de moderación y de sensatez (y de hartazgo) fue el que llevó a gran parte de la población a elegir al primer presidente de la democracia de entre las filas de la Unión de Centro Democrático. "¿Qué coño es el Centro?" Se preguntaban los fachas y los rojos. Básicamente una zona de seguridad donde no pudieran estar ellos, al menos durante los primeros años del postfranquismo. Un sitio inventado desde donde destruir los restos de la dictadura, convertir en proscritos a los natziss, moderar al ejército y transformar a los rojos en burgueses a los que, con el tiempo, les diera vergüenza hasta levantar el puño para cantar "La Internacional". En esencia, los pilares de la puñetera democracia que "disfrutamos" ahora.

Diversas caricaturas del "presi" / Curiosos marcapáginas con los políticos de moda de la época

Ese invento coyuntural del "Centro" tuvo su personificación en Adolfo Suárez, un antiguo falangista, hombre de confianza del rey de Hispania, patriota y valiente, que sirvió de puching ball y chivo expiatorio a unos y a otros. Con el tiempo, y viendo cómo lo hicieron después Felipito Tacatum, "Tamostrabajandoenello" Aznar y el tontopolla de Zapatero, y viendo como lo están haciendo Rajoy y sus muchach@s, Adolfo Suárez pasará a la historia como un héroe, un líder y un excelente político. Se lo han puesto demasiado fácil. 

El chiste gráfico es de antes de Rajoy, por eso no está

¡Hay que ver cómo dejaron las paredes en 1977! / El natural carisma de Suárez hizo que fuera su persona, y no
el partido, el eje de la campaña electoral de la UCD.

Suárez sucedió como presidente del gobierno a Arias Navarro, el pusilánime franquista llorón que anunció la muerte del Generalísimo políglota. En su mandato se afianzó la Democracia, se legalizó al Partido Comunista y a mogollón de partidos raros que luego desaparecieron, volvió la Generalidad, se hizo una profunda reforma política, legislativa y, sobre todo, se creó la Constitución. Y todo esto entre asesinatos, huelgas, crisis económicas y el lanzamiento del primer disco de Ramoncín, el marica de terciopelo rey del pollo frito. Tiene mucho mérito la cosa.

Parece solo, pero agachados, con los calzoncillos sucios, están sus "valientes" compañeros.

Este hombre tenía algo de lo que adolece, y mucho, la clase política actual: Carisma, Imagen, simpatía, buena oratoria y, sobre todo, sentido del deber y del patriotismo. La mitad del país solo siente algo parecido a eso por la peña de su pueblo, por su santa patrona, o por su equipo de "furbol". Los rojeras y los garrulos asocian aún la palabra "España" al nacionalcatolicismo o la inquisición. Yo, ni siquiera iba con la selección porque estaban Arbeloa y otros mamones del Mandril. Los propios representantes del país llenan espuertas con todo el dinero robado y las envían a Zurich vía Bruselas. Nadie quiere aportar. Y sin embargo este hombre se sacrificó por su país, tuvo fe en un proyecto, aguantó palos y se retiró dignamente. 

Adolfillo fue el único, junto al General Gutiérrez Mellado, que no se lo hizo encima cuando los picoletos se
liaron a tiros en el Congreso de los Diputados / Los políticos antes tenían otro talante. Y fumaban como carreteros.

Yo era joven por aquellos días, en mi sangre bullía todavía el absurdo idealismo de un revolucionario de guardarropía que deseaba cambiar el mundo. Pensaba que Suárez solo era un ex franquista con piel de cordero, un facha como Fraga o incluso como Blas Piñar. Quería ayudar a aupar al poder al PAMACABOPUR (Partido Maoista Castrista Bolivariano de los Pueblos Reunídos Jeyper)... A galopar, a galopar al vent y esas cosas.

El ex-presidente vivió su tiempo. Aquí le vemos militando en las filas de HYDRA y jurando por
San Tiago Bernabéu. Y cuando toco abjurar, si te he visto no me acuerdo... ¡Con 2 cojones!

Mi padre, y como él millones de personas, tuvieron fe en este hombre y se dieron cuenta desde el principio de que era la única salida razonable en los tiempos que corrían. Tenían razón. Ahora, de mi opinión actual sobre la humanidad, solo se salvan Luis Aragonés, Paco de Lucía y Adolfo Suárez… ¡Ondia! Bueno, resién por ahí aún nos queda el Oleoleole Cholo Simeone… y el Capitán América. Poco más.

No sé si agradecerle a este gran hombre, duque de Suárez, Grande de España (solo parangonable al Conde Duque de Olivares, a Sagasta, a Juan Carlos Arteche y a Cánovas del Castillo) lo de la instauración de la democracia. Total, la Democracia es un puto timo, igual que el Fascismo, igual que el Comunismo, o cualquier otra forma de gobierno. Dicen que es la menos mala de todas… ¡No sé yo! ¡Para los tertulianos mediáticos y para la U.G.T., sí, desde luego!

La corona tiene mucho que agradecer a este hombre. Él y el Rey fueron los protagonistas de la transición.

En realidad, y perdón de antemano por el arranque demagógico, todo reside en el dinero. La clave es quien lo genera, quien lo administra, quien lo distribuye, y sobre todo, quien se lo queda. Los partidos y las ideologías son atrezzo, un puto decorado para que aplaudamos al vacío mientras nos enculan.

Mucho más eficaz que ir a pegarse con la policía en las calles, sería ponerse de acuerdo en una insumisión fiscal global. Y en retirar todo el efectivo de los bancos, que son el enemigo real. Si les quitas el dinero, les quitas todo, así de fácil. No les interesa nada más que eso, la pasta. Tu educación les suda la polla si no es para adoctrinarte. Tu salud (pública o privada) se la trae floja. Solo eres un número, un porcentaje, un cliente eventual, solo quieren saber de tu rendimiento como persona física, y robarte el 21% de cualquier cosa que hagas. Tu dinero está fiscalizado, secuestrado, cuando no robado directamente, por los bancos y el Estado. Somos meras moscas en una gigantesca tela de araña. Por esto es por lo que necesitamos gente en la que creer, gente altruista que se deja la vida por una idea, por un equipo, por un país, por nosotros… es por eso que nos vendrían bien políticos como los de antes. Es por eso por lo que puedo prometer (y prometo) que siempre recordaré con gratitud, respeto y orgullo al último patriota. Al único presidente que ha sido digno de serlo. Ya sé que es una incongruencia pero: ¡Adolfo Suárez ha muerto! ¡Viva por siempre Adolfo Suárez!

¿Tú no tendrás pirulas pa pasarme?

Dedicado a la gente de hoy en día que piensa que el Centro es un sitio donde ir a manifestarse o un pase con rosca desde la banda. Y también a la insigne periodista de Televisión Española, que en la Capilla Ardiente del ex-Presidente, le pregunta a una señora: ¿Se emociona? ¿Por qué? 

¿Qué es lo que más recuerda de Alfonso Suárez?  ¡Ole por el periodismo de altura!

Rafa Martínez Sainero, Pirata, Marzo de 2014