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En el marco del XX Certamen de Teatro de La Universidad Complutense de Madrid, se estrenó el pasado 9 de mayo en el Paraninfo de la Facultad de Filología la obra “Salud, dinero y trabajo”. La obra es una creación colectiva basada en varios textos del dramaturgo argentino Osvaldo Dragún (1929-1999)
La obra que nos ofrece en esta ocasión “El Barracón” es una trilogía de cuentos de contenido social. Una de ellas “No hay trabajo” es una adaptación libre de “La historia del hombre que se convirtió en perro”.
La puesta en escena es muy original: Sin ningún tipo de atrezzo, decorado, maquillaje o vestuario especial, todo es dejado en manos del elenco, un grupo de talentosos jóvenes que con su brillante y nada fácil actuación llenan el desnudo y vacío escenario con dinamismo y una energía digna de elogio. El espectador baila en esta ocasión al son del movimiento del intérprete, ayudado tan solo con un eficaz y acertado juego de luces que nos van situando en uno u otro escenario imaginado (Ora la clínica de un dentista, ora la madrileña plaza de Cibeles, luego en el despacho de unos desalmados capitalistas o en el hogar donde espera una desesperada esposa poco comprensiva)
El formato ayuda a dinamizar el desarrollo de la obra. Las tres narraciones hablan de lo mismo desde diferentes enfoques. Hablan de la crueldad humana, de la avaricia desmedida del capitalismo salvaje que nos ahoga, de la alienación y degradación del hombre a causa de la necesidad de conseguir trabajo para poder sobrevivir, desmintiendo categóricamente la famosa frase nacional-socialista de “El trabajo os hará libres”
En resumen: Un gran trabajo de creación y adaptación. Enormes interpretaciones, que dentro del realismo necesario para hacer creíble al personaje, llevan también su punto de esperpento, de caricaturización que otorga un punto de humor dentro de tanto drama social.
“Salud, Dinero y Trabajo” es crítica social pura y dura, pero también una excelente reflexión sobre la sociedad actual. Ya sabemos todos como está el patio, pero a veces es conveniente que nos lo recuerden con Arte y con Talento. La conciencia se queda un poco más tranquila cuando constatas que algo se remueve, que aun se puede contar. Que todavía hay esperanza.
Rafael Martínez Sainero, Pirata 2016
EL BARRACÓN
presenta:
“Salud, dinero y trabajo”
(Creación colectiva basada en textos de Osvaldo Dragún)
Duración: 55 minutos.
Intérpretes
(por orden de aparición):
Arturo Dimaggio
Laura Ferrer
Javier Martín
Ignacio L´Orbe
Iluminación: Elena Conde, Roger Sanchís, Pablo López, David Lima.
Producción: Alberto Rodríguez, Alejandro García y Carlos Manrique.
Tenía una deuda pendiente. Le debía a una amiga desde hace mucho tiempo un relato erótico dedicado. Pues ¡Hale hop! Lo prometido es deuda...
Una Noche en Praga con Sissy
(de la exitosa serie “Otra noche sin pragas”)
Podía invitar a Sissy a cenar, o a comer, o a almorzar, o a merendar. Daba igual, nunca comía nada. Solo bebía… y mucho… y casi nunca agua.
Mientras hablábamos, desenrolló el alambre del tapón de la botella de champán y lo había vuelto a armar varias veces. Luego lo transformó en un muelle, luego lo estiró hasta convertirlo en un rectísimo florete de esgrima con guardas y gavilanes.
Mientras la conversación transcurría por los apacibles senderos de “¡Qué rico que está esto! ¿Verdad?” (Diálogo absurdo, por otra parte, ya que solo comía yo… ¡Más me hubiera valido invitar a un menesteroso!) su maestría dactilar transformó el alambre en un perrito; pero cuando los pies del diálogo se metieron hasta las trancas en el farragoso charco de “¡Buah, qué guapa que estás esta noche, tía… Haces que me sienta abrasadoramente genésico!” sus manos empezaron a moverse a una velocidad imposible de seguir por el ojo humano y transformó el alambre como por intervención divina en un Ferrari F-1 turbo inyección del 76.
Uno ignoraba si la inquietud de la muchacha se debía a que le turbaba la idea de estar frente a un individuo que le acababa de manifestar su admiración y de resultas dello sentíase abrasadoramente genésico. Yo desconocía, asimismo, si ella se sentía igual de ardorosa, o, por el contrario, le urgía salir por pies del restaurante huyendo de semejante sátiro. Su habilidad con las manos y dedos hizo que mi mente se zambullera en un piélago de fantasías, si no eróticas, sí pornográficas.
- Esta mujer tiene que ser mía, pensé.
- Yo tengo que ser suyo, seguí pensando.
- ¡Santo Cristo! – dije ya en voz alta - ¿No es eso la Torre Eiffel?
- Si, y he puesto a algunos visitantes subiendo.
- ¿Nerviosa?
- ¿Nerviosa yo? ¿De qué?
- De los nervios.
Fuera como fuera la cosa, los nervios no impidieron a la mollar Sissy acompañarme a Praga, concretamente al Hotel Praga, donde pretendíamos desfogar nuestros instintos más lúbricos por la vía rápida, follando lentamente hasta derretirnos.
El ascensor estaba lleno de botones, uno humano con gorrito ridículo y otros muchos con números impresos. La presencia del humanoide me impedía comenzar los prolegómenos “ad líbidum” con Sissy. Hubiera estado muy bien marcarse un previo antes de entrar en la “suite”. Tal vez una somera masturbación, su espalda pegada contra el espejo, con las bragas a la altura de los muslos y la faldita bajada hasta los tobillos. Hubiera sido un bonito detalle con el encargado de vigilar las imágenes de las cámaras de seguridad, un excitante modo de vencer el tedio de observar toda la noche una cabina llena de botones.
Tras utilizar el baño como si fuera gratis: a tope de agua caliente y con todos los productos de limpieza en su interior (geles, champús, sales minerales, dentífrico…. Hasta la esponjita para limpiar zapatos…) procedo a arrancar el somier de la cama y ponerlo en el suelo apoyado contra la pared, a modo de reja de penal. El colchón también al piso... ¡Hala!... Me desgarré la camiseta con la calavera impresa que llevaba bajo la camisa para obtener jirones de tela con los que poder atar a la reja las muñecas de mi querida Sissy.
Usé los restos de camiseta restantes para improvisar una venda y taparle los ojos, para que no supiera en ningún momento lo que iba a suceder. Siempre es una sensación agradable sentir que alguien se entrega a ti hasta el punto de quedarse indefenso y a tu merced.
Y ahora, a causa de la política de
blogger, el resto del relato, dado su contenido porno erótico lo colgaré en “El
Pirata Bizarro”. Quien quiera ver el final que pinche akoi.
Es curioso esto de las nuevas tecnologías. Antiguamente los dramas y las alegrías solían darse en vivo y en directo. De forma presencial. Ahora puedes estar en la cima del mundo, sintiéndote el hombre más feliz de la Humanidad, y en menos de dos líneas torpemente escritas con el dedo gordo, ver pasar de largo el amor, a toda hostia, alejándose por las líneas de las redes ADSL WIFFI o como coño se llamen y perder en un microsegundo una de las cosas más bonitas que te han pasado en tu puñetera vida, diluyéndose como un azucarillo en agua o, como decía mi replicante preferido, olvidadas como lágrimas en la lluvia.
Pero la vida y la muerte son así, no miran el reloj. Tres semanas de felicidad pueden valer a veces por toda una vida de tedio. Y a modo de triste consuelo siempre nos quedará la música.
CAPIAMÉRICA III “CIVIL WAR”: LA MÁS DELICIOSA ENSALADA DE MAMPORROS NUNCA VISTA.
Como siempre, aviso: Esta crítica "sinematográfica", por llamarla de algún modo, esta ahíta de spoilers hasta decir: ¡Basta!... "Asín" que el que quiera asistir virgen al cine, que deje de leer ya.
"Poster de la peli / "Unidos nos mantendremos en pie, separados, caeremos"
Título original: "Captain America III Civil War" (USA 2016) 147 minutos.
Directores: Anthony Russo, Joe Russo
Guión: Chris Markus, Stephen McFeely (Cómic: Mark Millar basado en los personajes de Joe Simon y Jack Kirby)
Música: Henry Jackman / Fotografía: Trent Opaloch
Reparto: Chris Evans, Robert Downey Jr., Scarlett Johansson, Sebastian Stan, Anthony Mackie, Don Cheadle, Jeremy Renner, Chadwick Boseman, Paul Bettany, Elizabeth Olsen, Paul Rudd, Emily VanCamp, Tom Holland, Daniel Brühl, Frank Grillo, William Hurt, Martin Freeman, Marisa Tomei, John Kani, John Slattery, Alfre Woodard, Stan Lee, Heidi Moneymaker, Gene Farber, Florence Kasumba
Productora: Marvel Studios / Marvel Entertainment / Sony Pictures Imageworks (SPI)
Dicen que durante el rodaje y unos cuantos ratejos después, el capi se lo estuvo haciendo con la brujita escarlata.
¡Qué buen rollito! ¡Qué escotazo! ¡Qué par de tetas tan bonitas! ¡Eso sí que son super poderes! / Foto: Premier
Europea del estreno de Cap America III Civil War, de los hnos. Russo.
Tan flipado y entusiasmado como Chris Evans con el escotazo de Elizabeth Olsen he quedado yo después de ver "Capi III Guerra Civil".
Con esto de la saturación de pelis de super héroes, los hermanos Russo han dado con la clave anti-aburrimiento: Coge la coctelera y mete más de todo: Más héroes, más ensaladas de hostias, más interrelaciones personales, más drama, más humor... ¡¡Más de todo!! Y así parecerá que estás viendo Capitan America III, o Los Vengadores III, o Iron Man IV o Black Panther I...
¿Hasta qué límite de perfección pueden llegar los Russo planificando, ensamblando y ejecutando escenas de acción? No lo sabemos, pero es difícil superar esta maravilla visual que nos ofrecen en “Captain America III Civil War”. Quizás el guión sea más flojo que la anterior “Captain America II The Winter Soldier”, quizás el malo maloso quede un poco light, dado que la acción se la comen todita los Vengadores, Spíderman, Ant Man, el Soldado de Invierno y Pantera Negra, que se bastan solos para mantenernos embobados y amarrados a la butaca viendo esa coreografía perfecta que son sus continuas peleas fratricidas, pero merece la pena.
Escuchando el himno antes de fostiarse.
Y es que este supergrupo lo tiene todo: Mirando a los megapoderosos “Liga de la Justicia” todo queda en una continua exageración pretenciosa y megalómana de DC Comics. Todo un tanto serio frío y triste. Los Cuatro fantásticos molan, pero no dejan de ser una familia en toda regla. Los Inhumanos son una Corte Real exiliada en un mundo escondido, con sus enredos shakesperianos a cuestas. Los X-MEN, alumnos aventajados de colegio y una especie mutante elitista, también tienen su rollito, pero con la colección de pirados solitarios que inventó MARVEL en su día, con los VENGADORES se forma el mejor (o el peor, según se mire) equipo de súperhéroes de la historia.
"Ilus" guapa del equipo del Capi. Falta Wanda Maximoff ¡Qué le vamos a hacer!
Los “Vengatas” son los “Vengatas”, solitarios reunidos Jeyper, monstruos de feria desequilibrados. Una panda que se están dando de leches entre ellos mutua y continuamente. Eso es lo que hace grande estas reuniones sui-géneris: Sus conflictos internos, los culebrones emocionales. Eso es lo que mola de ellos, ni siquiera se necesita un villano megalomaniaco que quiera dominar el mundo o destruir el planeta, los vengadores se bastan a sí mismos para desparramarlo todo, para llenar la pantalla, para inundarnos de felicidad viéndoles partirse la cara, meter la pata, mosquearse, enamorarse...
Vale, es un final un tanto flojeras al que le falta un poco de “punch” final. Perdonemos el hecho de que el Doctor Zemo decepciona un tanto al esperarnos un barón megacriminal nazi y toparnos luego con un padre de familia desolado que mete cizaña a lo "Seven". Pero todo queda redimido al comprobar que por fin Spiderman se parece a Spiderman, un adolescente que habla y se mueve como el de verdad, como el de los cómics de Steve Ditko, que tiene una Tía May fabulosa (Ni más ni menos que Marisa Tomey), que no nos ponen el origen… todo genial.
Viñeta del cómic original. Una pasada. Nota Spoiler: En la peli sale.
Son dos horas y media de puro entretenimiento palomitero que se pasan en un santiamén: Diálogos ágiles, montaje perfecto, todo medido al milímetro para deleitar a los fans (que cada día “semos" más) de MARVEL.
Solo por oír la referencia que hace Spideya la saga “Star Wars” durante la multitudinaria pelea en el aeropuerto de Leipzig ya merece la pena pagar la entrada… "¿Os acordáis de la segunda peli de la Guerra de la Galaxias?" "¿Alguien la ha visto?"
No va a quedar títere con cabeza.
Pues eso, que no voy a hacer ningún comentario erudito ni a ponerme "estupendo" poniendo pegas (que las tiene) a esta peli… Solo recomendaros que vayáis a verla y que la disfrutéis… Es cine y cómic en estado puro, un enorme blockbuster de consumo, pero realizado con inteligencia y sobre todo con mucha, mucha calidad. Solo deciros que se me caían lagrimones de pura felicidad mientras veía esta cinta con esquema cuasi de serial televisivo. Escena tras escena saltando de una línea argumental a otra. Y además es curioso que aunque salga más gente que en una telenovela venezolana, todos los personajes tienen su espacio y desarrollan y aprovechan a la perfección su rol. Ya sean veteranos o novatos. ¡Amazing! ¡Excelsior! ¡Más cine, cine por favor! ¡Más superhéroes! ¡Y si son vengadores, mejor! Reconozco que soy adicto a esto y maldigo la lentitud que conlleva producir pelis tan monstruosamente espectaculares.
La vida es corta, todo va muy rápido, así que ni lo dudéis: viajad, bebed, amad, besad… y si tenéis un hueco, id a ver “Capitán América III Civil War”… ¡Una gozada!
Champions League temporada 2015 -2016 - Bayern de Munich 2 -AtléticodeMadrid 1 (Antoine Griezmann)
Ya lo dijo Juanfran Torres tras perder la final de Lisboa: ¡Que no se preocupen los atléticos, que volveremos a jugar una final de Champions!Y ahí está ¡Con dos cojones!
La venganza es un plato que se sirve frío. De momento se ha despachado la cuenta pendiente que se tenía con el Bayern. ¡¡Qué dolor, aquella primavera del 74, al ver a los alemanes dando la vuelta de honor en Heysel con la orejona, todos ataviados con la elástica de Luis Aragonés, con la de Gárate, Heredia, Ayala…!! Y ni te cuento la de Lisboa, con Ramos metiendo la cabeza en el peor momento posible… Bueno, la vida da estas segundas oportunidades y ahora no se puede fallar, la gloria está a un tiro de piedra, contra el más odiado enemigo, el de siempre, en la bella Milán, que el día 28 vibrará con los gritos de ánimo de una hinchada que no tiene parangón en la Tierra. Esa copa tiene destino, y ese destino es la ribera del Manzanares, feudo del mejor (en todos los sentidos) equipo del mundo. ¡Suerte, campeones!
