- Hola, buenos días - dijo al entrar.
Pero era mentira.
Pero era mentira.
Rafael Martínez Sainero, Pirata 2015
Me ha quedado un genial microrrelato sobre deseos y formalismos sociales. ¿A que sí?
No sé si será el más corto de la historia. Pero por ahí le anda. 11 palabras (Incluyendo el título) que aglutinan la falsedad de nuestra actual sociedad. Si fuera argentino ya estaba yo en el Olimpo de los creadores literarios.
No sé si será el más corto de la historia. Pero por ahí le anda. 11 palabras (Incluyendo el título) que aglutinan la falsedad de nuestra actual sociedad. Si fuera argentino ya estaba yo en el Olimpo de los creadores literarios.
Ya puestos, he buscado otros muy, muy cortos y muy, muy buenos.
Monterroso escribió su famosísimo "El Dinosaurio", que durante un tiempo pasó por ser el relato más corto de la historia de la Literatura.
Cuando despertó, el dinosaurio todavía estaba allí.
Hasta que en el año 2005 se publica otro microrrelato, del mexicano Luis Felipe Lomelí, que con sus 4 palabras destrona a "El Dinosaurio" del podio del cuento más corto del mundo:
- ¿Olvida usted algo?
- ¡Ojalá!
Chuang Tzu soñó que era una mariposa y no sabía al despertar si era un hombre que había soñado ser una mariposa o una mariposa que ahora soñaba ser un hombre.
Herbert Allen Giles
Monterroso escribió su famosísimo "El Dinosaurio", que durante un tiempo pasó por ser el relato más corto de la historia de la Literatura.
EL DINOSAURIO
Cuando despertó, el dinosaurio todavía estaba allí.
Augusto Monterroso
Hasta que en el año 2005 se publica otro microrrelato, del mexicano Luis Felipe Lomelí, que con sus 4 palabras destrona a "El Dinosaurio" del podio del cuento más corto del mundo:
EL EMIGRANTE
- ¿Olvida usted algo?
- ¡Ojalá!
Luis Felipe Lomelí
EL SUEÑO DE CHUANG TZU
Chuang Tzu soñó que era una mariposa y no sabía al despertar si era un hombre que había soñado ser una mariposa o una mariposa que ahora soñaba ser un hombre.
Herbert Allen Giles
EL HOMBRE INVISIBLE
Aquel hombre era invisible, pero nadie se percató de ello.
Gabriel Jiménez Emán
TODA UNA VIDA
Lo vio pasar en un vagón de metro y supo que era el hombre de su vida. Imaginó hablar, cenar, ir al cine, yacer, vivir con él. Dejó de interesarle.
Beatriz Pérez-Moreno
Felicidades por El jefe. Mi comentario también es hiperbreve, pero sincero. Saludos.
ResponderEliminar"Lo breve si..." que dicen. Muchísimas gracias, Carmen.
ResponderEliminarTengo un cuento bien corto sin publicar.
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