Cuando tras 2 horas y 20 minutos de bofetones, explosiones, disparos,
sonrisas y lágrimas, la película acaba y te quedas con ganas de más, eso es que
te has divertido. Y mucho. “Los Vengadores” (Joss Whedon, 2012) es un circo en el
que todos los números son únicos, sorprendentes y espectaculares, y además
están habilidosamente entrelazados entre sí. El maestro de pista de
este desmesurado circo no es otro que nuestro friki de oro: Joss Whedon. Es más que evidente el
acierto de MARVEL al ponerlo al frente de este ciclópeo macro-proyecto. Whedon es, ante todo, un guionista que maneja los diálogos, la interacción entre
el elenco y el sentido de la sorpresa narrativa como nadie; Es sin duda el
marionetista ideal para manejar los hilos de unos personajes que hace suyos
desde el principio y que consigue que nos caigan bien, incluido el villano de
turno, que como no podía ser de otra manera para la primera aventura de los
Vengadores, es Loki, el dios nórdico
del mal. Lo más atinado de esta cinta, a mi modesto entender, es que no intenta
ser una obra de autor, aunque sin pretenderlo lo ha conseguido, ya que tiene un
aire muy de Whedon, familiar para
aquellos que han visto sus anteriores trabajos. En ningún momento se pretende
supeditar la profundidad de la psique de los protagonistas a lo que siempre
hemos demandando desde siempre los fans de las películas de superhéroes: aventuras,
fantasía, acción a raudales, peleas por doquier, risas, diálogos con chispa, drama,
muertes, heroísmo... lo queríamos todo y
por fin lo tenemos. Aquí la acción es la estrella absoluta. Todos se mueven por
y para el espectáculo. No se trataba de hacer una película basada en un cómic,
como han hecho casi todos sus antecesores, sino en reescribir el cómic en la
pantalla. Misión conseguida: MARVEL nos ha presentado a sus monstruos de feria
como nadie. Hulk es más Hulk que nunca, Iron Man sigue creciendo como personaje día a día, gracias a un Robert Downey jr inmenso; la preciosa Viuda Negra hace honor a su nombre,
venenosa y letal; Ojo de Halcón
vuelve a sus orígenes, de villano forzado a héroe; el Capi a lo suyo, heroísmo y sacrificio en estado puro; Thor partiéndose la cara con amigos y
enemigos; Furia haciendo ejercicio físico y disparando ¡Por fin!... hasta Coulson y Hill tienen sus momentos. Y como no, el bueno de Stan Lee, en un cameo genial.
Así da gusto ir al cine, señoras y señores. MARVEL ha
logrado con estos “héroes más poderosos de la tierra” que todos salgamos del
cine con una enorme sonrisa, o lo que es lo mismo, un poco más felices. Gracias,
Whedon, gracias MARVEL, gracias Cine.
Rafael Martínez Sainero. Pirata 2012
Cuatro preciosos carteles de autor, con los 4 vengadores más famosos de la historia de este gran grupo.
Muy cañera, efectivamente... Te quedas clavado en la butaca con ganas de disfrutar otras dos horas de explosiones y superguantazos!! Acierto total si no la ves en 3D porque puedes salir con un supermareo de la sala...
ResponderEliminarEl único personaje que, a mi juicio, queda algo empequeñecido es Thor, al que dan poco protagonismo aéreo, en favor de Iron Man (e incluso, Hulk), y que parece haberse olvidado de que su martillo Mjolnir le permite realizar grandes proezas en dicho medio.
Por contraste, la mejor curra de la película (grandiosa) la protagonizan él y el gigante verde (la masa, no el de las legumbres) en la primera aparición de éste, además del galleto sorpresa que le endiña al dios del trueno cuando ya son equipo y a Hulk no le queda nada más que "aplastar". Inconmensurable, por Odín!
Otro momento impagable es el "travelling" interminable que nos muestra a todos los vengadores, uno a uno, dando caña a las fuerzas hostiles alienígenas a lo largo y ancho de la ciudad. Espectacular!
Si señor, Guelox, completamente de acuerdo. La pelea en el hangar entre rizitos y la increíble Masa es cómic Marvel en estado puro. Y cuando Thor le mete un viaje con el martillo Uru a Hulk, y Whedon decide ponerlo en cámara lenta, es como una alucinante viñeta congelada en el tiempo.
EliminarLo que comentas de Thor es cierto, da un poco de grima verle agarrado a la antena del Chrysler Building en plan "¡Ay, que vértigo, que me voy a caer!" cuando él es muy capaz de hacer eso mismo suspendido en el aire, con Mjolnir repartiendo rayos a diestro y siniestro a los aliens, y además hubiera quedado más espectacular. Lo que pasa es que todo el protagonismo aéreo se lo queda cabeza de lata que para eso es el que más cobra. También se echa de menos el grito de batalla ¡Vengadores Reuníos Geyper! antes del traveling circular cuando se reúnen y algún plano en bolas de la viuda negra ¡ja, ja, ja!
Con respecto al traveling siguiendo a los vengatas en la batalla... ¡De orgasmo! Solo comparable a la entrada de Luke en el pasillo de la estrella de la muerte... Y como diría nuestro amigo Vader ¡Sentí algo que no sentía desde...
Muchas gracias por tu comentario, fiera.