¡Va por tí, Luis! |
En la noche más hermosa, la del emotivo adiós al abuelo Zapatones, Villa marca y dedicatoria al cielo, que ayer se tiñó de rojiblanco; marca también Diegol Costa su gol 21; regreso triunfal de Diego Ribas, que también moja y parece que no se hubiera ido nunca.
Esto que voy a poner ahora no se veía desde el siglo pasado, desde los tiempos de mi "juventú"... y después de la de Scarlett Johansson, es la imagen que más me puede alegrar la vista: Tras chorrocientas mil jornadas con el Barça al frente de la clasificación... ¡¡El Aleti es líder!! ¡¡ A-le-lu-ya!!
¡Es que no paro de mirarlo! ¡Como que no me lo creo! |
Luis Aragonés
Símbolo, mito e historia viva del glorioso Atlético de Madrid
Vivimos en unos tiempos tan absurdos que leo en la pantalla del ordenata:
"Tras una lucha de 2 meses contra la leucemia, fallece en Madrid Luis Aragonés. A 33 personas les gusta esto."
¡Pero qué hijos de puta! ¿No? Era un tío un tanto borde, pero tampoco es para ponerse así. Pues a mí, mire usted señor Fachebook y miren ustedes 33 cabrones, no me ha gustado un pelo que se muera Luis. Y digo "Luis" así, a secas, porque "Luis Aragonés" es el nombre del entrenador, ese tío del pelo blanco con más mala leche que los tártaros y que mandaba a tomar por culo a cualquier periodista que le tocara los bemoles. El nombre del futbolista, ese maravilloso interior izquierda que sacaba las faltas como nadie, ese 8 pundonoroso rojiblanco, era simplemente Luis. Y era, junto con el gran Gárate, y con Ufarte, y Adelardo, e Irureta y Collar, uno de los ídolos de mi infancia. La delantera de moda junto a la de Anita Ekberg.
La dolce vita... Gloriosas décadas con gloriosas delanteras. ¡Aiiins, Anita!! |
Ayer se rindió un sentido homenaje a Luis en el estadio Vicente Calderón, en su casa. Al minuto de silencio de rigor, le siguieron otros de un silencio mucho más sobrecogedor que el preceptivo, y entonces, en el minuto 8, el Estadio del Manzanares, y en sus gradas la mejor afición del mundo, rompieron a cantar su "Hasta siempre" al que ha sido y será leyenda del Atleti, su más famoso dorsal número 8: Luis Aragoneeeés… Luis Aragoneeeeés… Luis Aragoneeeés… Luis Aragoneeeeés… Luis Aragoneeeeés… Luis Aragoneeeés… Luis Aragoneeeeés…
Luis solo tenía de aragonés el apellido, ya que era más castizo que los callos y el chotis. Seguramente muy de cañas en el Alarcia y la Cruz Blanca, de vermú de grifo en Bodegas Casas, o de huevos rotos en Casa Lucio, de señoritas de vida alegre en los clubes de alterne del Doctor Fleming y de mucho casino de Torrelodones, que al sabio no solo le gustaba ganar jugando al fútbol... Madrileño de pura cepa... Atlético hasta la médula, le llegó a decir a uno de los asistentes de la FIFA: "¡Oiga, pollo, eso que está usted pisando es el escudo del Atlético de Madrid!".
Luis Aragonés fue en su día jugador del Real Madrid. Esto puede sonar a sacrilegio, pero es verdad. Como lo es también el hecho de que jamás jugó un solo minuto de blanco. Estuvo cedido en el Recre, en el Hércules y en el Plus Ultra, hasta que en 1961 le ficha el Real Club Betis Balompié, y en el 64 el Club Atlético de Madrid. En el "Glorioso" hizo una carrera memorable, siendo campeón de liga 3 veces (1966, 1970 y 1973) y de copa del Generalísimo 2 (1965 y 1972). Además fue Pichichi en la 69-70. También fue internacional con la selección española en 11 ocasiones.
Derroche de coraje y corazón. Desde tiempos inmemoriales (más o menos desde finales de los sesenta) el orgullo de la capital de las Aspañas. |
El mismo año que queda subcampeón de la Champions con el Aleti, 1974, se hace entrenador colchonero y gana la copa Intercontinental al Independiente de Avellaneda. Luego sería un no parar: la liga de 1977, las copas del Rey de los años 1976, 1985 y 1992, la supercopa del 85 y la copa Ibérica (1991).
Con el Barça, del que también fue "mister", ganó la copa de 1988.
Luis ha sido Premio Príncipe de Asturias de los Deportes, Mejor entrenador nacional temporada 76-77, Medalla de Oro de la Real Orden del Mérito Deportivo, Mejor seleccionador del año (IFFHS, 2008)... |
Pero su mayor hito como entrenador fue ganar para España la Eurocopa de Naciones del 2008. Luis fue el único entrenador que tuvo los cojones de enfrentarse a la mafia de gacetilleros madridistas y quitar a Raúl González Blanco del combinado nacional.
He aquí una de las más famosas citas futboleras, dicha por Luis, y que marcaron un antes y un después tras el "Somos 11 contra 11" ó el "Sí, bueno ¿No? La competencia es dura. Tengo que aprovechar los minutos que me da el Míster".
"¿Sabes a cuantos Mundiales ha ido Raúl? A tres, ¿Sabes a cuantas Eurocopas ha ido Raúl? A dos, ¡Dime las que hemos ganado!". "Yo con Raúl no me he bajado los pantalones"
¡Hala, guapito! ¡A mamarla a Qatar! ¡A catar cipo...! ¡A Qatar! ¡A acatar la decisión que luego, al ganar la Eurocopa, callaría tantas y tantas bocazas! |
Esa Eurocopa tuvo un algo de reivindicación rojiblanca: Raúl fuera, Luis cambiando el estilo de juego, El niño Torres, el ídolo de Liverpool por aquellos días, marcando el gol en la final contra Alemania y paseando la bandera rojiblanca por Cibeles... Esa Eurocopa fue la que cambió radicalmente el rumbo del fútbol en nuestro país. Fue el origen de "La Roja". término que acuñó el propio Aragonés.
"Lo de la "furia española" no lo pudo explicar ni Menotti" dijo, y añadió "Me gustaría que la selección tuviera un nombre, una identidad. Igual que Brasil es la canarinha o Argentina la albiceleste, me gustaría que España fuera La Roja" Y terminó con un contundente "Cogí una selección, intento dejar
un equipo".
Y lo consiguió... Un equipo de Tiki-Taka, que diría el gran Montes, de "Jugones" |
El legado de perlas filosóficas de Luis Aragonés es bastante amplio. Su fuerte carácter y su sinceridad marcaron su carrera, dejándonos momentos y frases inolvidables. Vamos a ver algunas de las mejores frases de "Zapatones": Empezamos con la mítica frase que le dijo a José Antonio Reyes en un entrenamiento de la selección, refiriéndose al entonces compañero del sevillano en el Arsenal, Thierry Henry:
"Dígale de mi parte a ese negro que usted es mejor que él"
Esta frase generó mucha polémica y propició un aluvión de críticas de gacetilleros inquisidores sedientos de sangre, que le tildaron de racista, por lo que el Sabio de Hortaleza tuvo que explicarse, aunque no sé si hubiera sido mejor estar callado.
Yo no soy racista, solo soy ordenado. |
Luiz Pereira se partía la polla con los chascarillos del Zapatones |
"Yo he convivido con negros, a uno le molesta más que le llamen de color que negro. Eso se ha superado con facilidad". "Los he tenido de todas las razas... Hasta yo soy ciudadano del mundo y tengo un amigo japonés que es sexador de pollos".
Esta también es cojonuda. Y la definitiva es: "Un entrenador de fútbol debería ir en chándal a los partidos" |
Ya lo creo... Gattuso se sienta con las piernas cruzadas y se aplasta el cerebro |
Aunque Luis no sintiera vocación por la carrera religiosa, tenía su particular Teología de andar por casa y de vacilar a los periodistas:
"Dios no se mete en estas cosas, es justísimo. No va con España ni con nadie, aunque, bueno, Rusia es atea".
La frase de "Ganar y ganar y ganar" se la copió a Emilio Botín, a Blesa y a Luis Bárcenas. También es muy socorrida ahora, la frase que dijo de que "las finales no se juegan, se ganan" |
Y también dijo cosas tan trascendentes como estas:
"Amo esta profesión. Sólo con pisar un campo ya me encandila el olor a hierba".
"Sé lo que siente un jugador que escucha el himno. El futbolista es como un actor de cine, quiere salir, hacer tres goles y que la afición le aclame."
"Los jugadores tienen un día libre después del partido, con sus mujeres o lo que sea. Pueden hacer lo que quieran... En primer lugar porque estar conmigo es para cagarse".
"Sergio Ramos está muy bien en la foto y está saludando a una persona. Es su día libre. Y no me encontró a mí en el día libre en una discoteca de milagro".
"Digo más veces "Vete a tomar por culo" que "Buenos días".
"Al Rey lo conozco desde que era Príncipe y tengo una anécdota con él. Una vez me entregó la medalla de oro deportiva y yo le dije: Rey, no sería mejor que nos diera un poco de dinero mensualmente. Y cada vez que le veo le pregunto: ¿Cómo va lo nuestro? Y me responde: Lo nuestro va bien, pero sigue como está".
"Nos ha llegado el momento después de tantos años. Nos han metido hostias de todos los colores, vamos a demostrar ahí que forman ustedes un grupo excepcional. Si no llego a la final con este grupo es que soy un mierda y he organizado una mierda de equipo".
Corría la noche del día de San Isidro de 1974. Bruselas, estadio Heysel, final de la Copa de Europa de Clubes Campeones de Liga ("Champiñons Lij" en la actualidad)… Televisor marca "Iberia" en riguroso blanco y negro (culona pero resultona), 13 añitos que tenía el que les escribe, viendo desde los Madriles el evento. Instantes finales del segundo tiempo de la prórroga. Un tipo más feo que Picio, con unas patillas casi a lo Curro Jiménez y pinta de aguerrido albañil, se dispone a sacar una falta al borde del área, un pelín escorada a la izquierda. El 8 colchonero tiene 9 pasos por delante de él a una panda de cabezas cuadradas a los que se les conoce con el sobrenombre de Bayern München, los mejores jugadores del mundo en aquellos tiempos. Pero no pasa nada, él va vestido con los colores del Capitán América, el adalid de la libertad, el enemigo a muerte de los natzis. Los boches vestidos de blanco de la barrera no tienen opciones. Nada más golpear el balón él ya sabe que el cuero acabará en el fondo de la red a pesar de la estirada de Maier, por eso se gira sin ver como el esférico besa las mallas, y se dirige tan tranquilo al centro del campo, dando saltos con el puño en alto. Fueron solo unos pocos minutos, aquellos en los que el Atlético de Madrid fue por un instante el Campeón de Europa.
Gracias por todo Luis, tú has sido parte del espíritu que hace a este equipo tan peculiar, tan distinto del resto. Te has ido un poco antes de poder ver cómo el Atlético de Madrid te devuelve lo que la historia le quitó, su primera Copa de Europa, ganada ante el Bayern, la noche de San Isidro, patrón de Madrid, el 15 de mayo de 1974, 1-0 en el último minuto de la prórroga, con un golazo tuyo de falta directa. Aquel fue unos de los momentos más felices de mi vida.
Rafael Martínez Sainero, Pirata 2014
"¿Lo han entendido? Pregunto, ¿lo han entendido? ¿Sí? Pues esto, esto (golpeando la pizarra), no vale para nada. Lo que vale es que ustedes son mejores y que estoy hasta los huevos de perder con estos, en este campo. Son el Atlético de Madrid y hay 50.000 personas en la grada que van a morir por ustedes. Por ellos, por la camiseta, por su orgullo, hay que salir y decir en el campo que sólo hay un campeón y va de rojo y blanco."
Luis Aragonés
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